Varios países están comenzando un nuevo año escolar y esta es una buena oportunidad para volver a pensar en el tipo de educación que queremos que reciban nuestros menores. En lo que respecta a tecnología, sabemos que la concientización debe estar presente desde el primer momento en el que los niños manifiesten interés por computadoras, smartphones, tablets, consolas y otros dispositivos.

Sucede que Internet es más que una herramienta para ellos; es un espacio donde pueden aprender, divertirse e interactuar con amigos y familiares, entre otras cosas. Es en estas actividades en las que padres, maestros y adultos responsables deben acompañarlos a nivel físico y digital, para que puedan disfrutarlas de forma más segura y evitando los riesgos que acechan.

Particularmente en la escuela, el rol de los adultos no se limita a comprar las listas de útiles y hacer la inscripción en tiempo y forma; hay otras cuestiones que debemos considerar a la hora de encarar un nuevo año escolar. Temas que, por supuesto, involucran a la relación entre nuestros nativos digitales y la tecnología en el colegio, una relación que, afortunadamente, cada vez es más cercana dado que las instituciones son más abiertas a la actualización.

Por eso, hoy te presentamos cinco cuestiones que no debes pasar por alto en el regreso a clases 2017.

1. Uso del smartphone: con independencia, pero prestando atención

El primer paso siempre es dialogar con tus hijos. La charla debe ser recurrente y sincera, dado que tenemos que lograr un vínculo de confianza para que los chicos recurran a nosotros en caso de riesgos o dudas.

En este sentido, el modo de uso del smartphone y demás dispositivos tiene que estar en el centro de la conversación. La vuelta a clases es una buena oportunidad para renovar el diálogo y explicarles la importancia de la comunicación, por qué nunca pueden estar sin teléfono cuando salen de casa, y que de todas formas esto no significa que en clases deban usarlo todo el tiempo.

No tengas miedo de que tu hijo sepa más que tú sobre tecnología, porque aún así, tú sabes más sobre seguridad personal. Los niños y adolescentes suelen ser indiferentes a los riesgos de la tecnología, ya que crecieron con ella y no le temen. Sin embargo, no tienen tu experiencia de vida.

Enséñale que no todo es lo que parece en Internet, así como en la vinda en general, y dale herramientas para protegerse cuando o estés presente. Después de todo, debes darle su espacio y cierto nivel de independencia.

2. Información sobre posibles riesgos y cómo prevenirlos

El teléfono no es un enemigo, sino una gran herramienta, pero podría ser también la puerta de entrada a malware, spyware, engaños que intentan robar contraseñas e información personal, o incluso acosadores detrás de perfiles falsos.

Debes explicarle todos y cada uno de los potenciales riesgos, así como las formas de combatirlos. De tu lado quedará la instalación de una solución de seguridad para evitar las amenazas mencionadas, y una herramienta de control parental, que te ayudará a supervisar cuánto tiempo pasan tus hijos en línea con su equipo. Además, podrás bloquear el uso durante horarios de clase, como también filtrar contenidos que creas que no son adecuados para su edad y aplicaciones, como videojuegos o reproductores multimedia, para evitar la distracción mientras estudian.

Recuerda: la meta no es prohibir porque sí, sino más bien detenerse a explicar cuándo se puede y cuándo no, y cuáles son los motivos. De esta manera, el impacto será más sutil y los niños podrán comprender que en clases deben prestar toda su atención a sus estudios y profesores.

3. Vínculo con profesores

Es vital que asistas a las reuniones con maestros y profesores y que logres una buena relación, principalmente para que sean tus ojos en la escuela y puedan comentarte sobre el rendimiento de tus hijos. Además, ellos son quienes están todo el día con los chicos y pueden notar otras cuestiones, como comportamientos extraños o estados de ánimo llamativos.

No existe una regla para saberlo, pero estos síntomas pueden demostrar cuestiones vinculadas con la depresión, el estrés y la angustia. Incluso, en casos más extremos, pueden ser un diagnóstico de encuentros con amenazas como el cyberbullying y/o el grooming. Y si bien tú puedas enterarte por otras maneras, el feedback de los profesores puede ser vital para el rápido abordaje de estos temas.

4. Privacidad: redes sociales, fotos y geolocalización

Fotografías, videos, historias, estados de ánimo y dedicatorias son algunas de las actividades cotidianas entre niños y jóvenes online, y con el regreso a clases seguramente se incrementan. Por lo tanto, deberás estar muy atento para ver que usen las redes sociales de forma adecuada y consciente. No querrás que esté compartiendo demasiado...

No tengas miedo de ser “amigo” de tu hijo en redes sociales o “seguirlo”. De esta forma, podrás saber qué publica y qué piensa; quizá te lleves algunas buenas sorpresas sobre lo que opina del mundo y conozcas pensamientos que en otro contexto no te enterarías. No obstante, lo primordial es que evalúes en qué momentos tiene más actividad y qué comparte en períodos donde está fuera del colegio.

Sabemos que tanto el almuerzo como la salida de la escuela son momentos complejos, puesto que los chicos están en la calle, ya sea regresando a casa o al segundo turno (si es que tienen doble escolaridad). Es aquí donde debemos prestar atención y aconsejarles que nunca compartan fotos con la opción de geolocalización activada, ni que indiquen de dónde salen y hacia dónde van.

5. Actividades extracurriculares como forma de

Finalmente, y alineado al punto anterior, debes impulsarlos a que realicen actividades extracurriculares, ya sea que practiquen un deporte que les apasione, tomen clases de música o atiendan a encuentros culturales, como el cine y el teatro. Esto es crucial no solo para su desarrollo físico e intelectual, sino también para que tengan una interrupción respecto a su mundo online.

Piénsalo: están conectados 24x7, desde que se levantan hasta que se duermen. Hacer una actividad que los aleje al menos por una o dos horas de Internet será ideal para abandonar por un rato el mundo digital y centrarse en el físico, con otras actividades, compañeros y potenciales hobbies.

Además, cuanto menos tiempo pasen conectados, menos se exponen a los riesgos cibernéticos como el grooming, las estafas y las infecciones con malware que mencionamos anteriormente.

Esperamos que esta lista haya sido de tu interés y puedas implementar estos consejos para acompañar a tus hijos de la mejor forma posible en esta nueva vuelta a clases.