El Aeropuerto de Bristol, ubicado en el suroeste de Inglaterra, fue atacado por lo que parece ser un ransomware que obligó al aeropuerto a apagar las pantallas en un esfuerzo por mantener controlar la situación, publicó BBC.

El viernes pasado el aeropuerto anunció vía Twitter que estaban “experimentando ciertos problemas técnicos con las pantallas en las que se informan los vuelos”.

“Creemos que hubo un intento de llegar a parte de nuestro sistema administrativo y eso requirió que desactivemos un número de aplicaciones como medida de precaución, incluyendo la que provee los datos con la información sobre los vuelos que salen en las pantallas”, dijo el portavoz del aeropuerto James Gore. “Eso fue realizado para contener el problema y evitar cualquier impacto en sistemas que sean más críticos”, agregó.

Las pantallas ubicadas en lugares clave, como son los salones de arribos y partidas, no volvieron a estar activas hasta la mañana del domingo. Según este post en Twitter, el cual es el más reciente que realizaron desde el aeropuerto, hasta el domingo continuaban trabajando para reestablecer por completo la cobertura de las pantallas.

Mientras trataban de lidiar contra la infección del malware, el aeropuerto recurrió a medidas de contingencia tales como utilizar pizarras blancas y marcadores, así como posters de papel, en los cuales colocaban la información sobre arribos y partidas.

Ningún arribo o partida se vio afectado por lo que el vocero del aeropuerto de Bristol describió como un intento “especulativo”, en lugar de un ataque dirigido particularmente al Aeropuerto de Bristol. Por otra parte, la seguridad del aeropuerto y de sus sistemas en ningún momento se vieron en riesgo, dijo Gore. No se realizó ningún pago para que se reestablezcan los sistemas.

No es necesario remontarse mucho tiempo atrás para encontrar ejemplos de aeropuertos teniendo que lidiar con ciberataques. En el mes de marzo de este año el Aeropuerto Internacional de Atlanta Hartsfield-Jackson, el cual es el que más movimiento tiene a nivel mundial, tuvo la precaución de cerrar su red de Wi-Fi libre y deshabilitar algunas de las funcionalidades de su sitio web luego de que la red informática del gobierno de la ciudad fuese víctima de un ataque de ransomware.

En 2017, dos aeropuertos ucranianos estuvieron entre los afectados por ataques muy publicitados. En este sentido, el aeropuerto de Kiev estuvo entre las víctimas de un semi-clon de Petya en junio de ese año, mientras que el aeropuerto de Odessa tuvo que enfrentarse al ataque de Bad Rabbit en octubre.