La policía de Manchester, en el Reino Unido, fue blanco ayer de un ataque distribuido de denegación de servicio (DDoS), que hizo que su sitio web deje de funcionar.

En una declaración oficial, dijo que el sitio de "la Fuerza" (the Force, en inglés) había sido derribado dos veces tras el ataque -que se lleva a cabo generando un gran flujo de información desde varios puntos de conexión.

Según reportó, los análisis iniciales no encontraron nada adverso y pudieron restaurar el sistema con bastante rapidez. Sin embargo, la evaluación resultó ser defectuosa, ya que apenas habían conseguido ponerlo en línea otra vez, quedó de baja de nuevo.

Luego del segundo incidente, un usuario de Twitter bajo el apodo Prince le dijo a la policía de Manchester, textualmente y traducido al español: "Creo que el responsable de estos problemas fui yo :)".

El individuo, que afirma ser de Lituania, amenazó a la fuerza policial: "Revelen por ahí que yo fui el que derribó su sitio o no voy a parar aquí".

Esto fue una respuesta directa a un tuit anterior enviado por la policía, en el cual le informó a sus seguidores que su sitio estaba experimentando "dificultades técnicas".

"Lo estamos tratando como un ataque distribuido de denegación de servicio, que es un intento malicioso de interrumpir servicios", comentó el condestable subjefe Ian Hopkins. "Quiero tranquilizar a las personas porque el servidor del sitio no está conectado a ningún otro sistema de la Fuerza, y toda la información contenida en el sitio es pública".

Hopkins finalizó: "Pedimos disculpas por cualquier inconveniente que esto pueda haber causado a los miembros del público y estamos trabajando para resolver este problema tan pronto como sea posible".

Hace algunos días, la Agencia Nacional de la Delincuencia del Reino Unido también fue víctima de un ataque DDoS, en lo que se cree fue una respuesta directa al anuncio del organismo, el mes pasado, de que había arrestado a seis personas como parte del operativo Operation Vivarium.

Se cree que estos individuos han estado usando la herramienta conocida como Lizard Stresser, que básicamente permite pagar para dejar fuera de servicio sitios web por ocho horas cada vez.

Tony Adams, jefe de investigaciones de la Unidad de Delito Cibernético Nacional, dijo en ese entonces: "Pagando una tarifa comparativamente baja, herramientas como Lizard Stresser pueden invalidar compañías financieramente y privar a las personas del acceso a información importante y servicios públicos".