Ante todo quiero agradecer al diario InfoBae y Clarín de Argentina por hacerse eco de nuestra preocupación por la cantidad de infecciones realizadas por Conficker.

Según los datos obtenidos por nuestro Servicio Estadístico de Alerta Temprana, ThreatSense.Net, este gusano ha alcanzado un porcentaje de propagación mundial del 5% y del 8% en América Latina.

Sin embargo, en la Argentina, el gusano alcanzó el récord del 25% de todo el malware propagado en el país durante enero, dejando en evidencia la necesidad de gestionar la seguridad en forma adecuada.

Este porcentaje refleja una alarmante situación que repercute directamente en la falta de concientización, no sólo a nivel hogareño sino que, mucho más preocupante, en entornos corporativos. Una gran cantidad de infecciones se pudieron haber evitado de manera sencilla a través de la correspondiente actualización de seguridad y procedimientos claros tendientes a mitigar el impacto generado por este tipo de amenazas, las cuales no son novedosas ni sorpresivas.

En este caso en particular, la situación de la Argentina comparada con América Latina y el mundo demuestra la necesidad gestionar la seguridad de la información para evitar que estas historias se repitan, como ya sucedió con casos de códigos maliciosos altamente propagados en los últimos tiempos como Blaster, Sasser, RedCode, Zotob y otros tantos.

Cristian